Este curso, desde el Secretariado Diocesano de Pastoral de Migraciones, nos pusimos en marcha para preparar la Jornada Diocesana a finales de noviembre. Cada año lo celebramos en un lugar diferente de la Diócesis, para sensibilizar de manera más cercana. Este año tocaba la zona de Benidorm. Una de las acciones que desarrollamos es un curso de formación de Agentes de Pastoral de Migraciones. Lo anunciamos en las parroquias de Benidorm y se apuntaron unas 15 personas. Como la mayoría eran de la Parroquia Ntra. Sra. del Mar, decidimos realizarlo allí. Sólo pudimos hacer la primera sesión de manera presencial, por culpa del confinamiento, para las demás nos reinventamos con las sesiones telemáticas. Ahora que podemos juntarnos de nuevo, hemos optado por hacer la sesión final de revisión de manera presencial y con todas las medidas de seguridad, como podéis ver.

La experiencia del curso está siendo muy enriquecedora. Hay personas nacidas aquí y otras extranjeras. Hay experiencias de migración nacional y también internacional. Desde el primer día nos dimos cuenta de que todos y todas somos migrantes. Nos hemos ayudado unos a otros a abrir los ojos ante esta realidad. Ha sido muy bonito escuchar los testimonios de distintas personas sobre cómo ha sido el hecho de tener que salir de su país, en muchos casos por circunstancias forzadas, y las experiencias de acogida que han ofrecido desde aquí o han recibido al llegar. Hemos “humanizado” más esta realidad y a estas personas, a las que, en muchas ocasiones, encasillamos en un determinado perfil, porque sólo las vemos por televisión, o en Caritas. Nos hemos ayudado a no prejuzgar, ni a creernos todos los bulos que salen por los Medios de Comunicación que dicen que todos los inmigrantes son malos, negros, vienen en patera y quieren quedarse con “lo nuestro”. Hemos aprendido a ser más inclusivos, más acogedores, más comprensivos.

Ahora tenemos por delante la tarea de compartir esto que hemos recibido con las personas que tenemos cerca, especialmente con las comunidades parroquiales, para que también sean espacios donde acoger, proteger, promover e integrar a todas las personas, independientemente del color de su piel o de su país de nacimiento. El 26 de septiembre nos encontraremos para celebrar la Jornada Mundial del Migrante y el Refugiado con un encuentro formativo. El 17 de octubre rezaremos juntos en una Vigilia de Oración por los migrantes y refugiados. Y el 28 de noviembre celebraremos la Jornada Diocesana con una Eucaristía presidida por el Obispo de nuestra Diócesis. Previamente, haremos un acto público de sensibilización. Y a partir de aquí, la tarea de seguir acompañando a estas personas que llegan a nuestros pueblos y ciudades y que comparten y enriquecen nuestra vida y la de nuestros vecinos.

Desde el Secretariado, agradecemos a las parroquias de Benidorm su acogida y también a las personas que se han inscrito y han completado este curso y que forman parte ya del Equipo de Agentes de Pastoral de Migraciones de la Vicaría V.

PD: la primera imagen corresponde a la sesión inicial del curso, celebrada antes del confinamiento; las demás son de la sesión final, celebrada con todas las medidas de seguridad.